Asamblea de DSIC 2019
La Hermana Cynthia Folquer, priora de nuestra congregación, comparte cómo se vivió la Asamblea de la Confederación Internacional de Hermanas Dominicas (DSIC):
«Entre los días 12 al 17 de mayo participé en Roma, en la 9ª Asamblea General Trienal de la DSIC, junto a mas de 100 hermanas representantes de diferentes congregaciones dominicas del mundo. Fueron días intensos de escucha de diferentes realidades de cada continente y de intercambios fecundos. El lema de la Asamblea “Acolchando con los hilos de la colaboración: espacios de encuentro, renovación y esperanza”, nos inspiró cada día a crecer en el conocimiento mutuo y pensar juntas en caminos de mayor colaboración entre las congregaciones.
Los primeros días estuvieron dedicados a la presentación de informes de las coordinadoras de las confederaciones de los distintos continentes, dedicando un tiempo especial para escuchar informes especiales sobre la situación de Venezuela, Nigeria y el Congo. Las situaciones extremas de violencia y pobreza que se viven en tantos países y la presencia comprometida de tantas hermanas fueron una invitación a continuar fortaleciendo nuestra presencia en estas situaciones de tanta vulnerabilidad.
También se informó sobre las acciones a favor de las mujeres que se realizan desde nuestra presencia como hermanas dominicas en la ONU y la coordinadora de Justicia y Paz e integridad de la creación, presentó la memoria de todo lo realizado en esta dimensión durante el trienio. El grupo Scala Music (Grupo Scalabriniano) realizó una performance sobre la problemática de la trata de personas, la letra de las canciones, los videos y la danza, nos llegaron al corazón y nos movilizaron respecto a este drama humano.
Marie Thérèse Clément quien presidió el trienio que finaliza, realizó un informe de los pasos dados para constituir canónicamente a DSIC y con personería jurídica civil, lo que otorgará a nuestra confederación con ámbitos de mayor autonomía y capacidad de acción.
Escuchamos también experiencias de hermanas jóvenes de diferentes partes del mundo que ya participan en proyectos de colaboración y formación conjunta, y nos comprometimos a continuar provocando experiencias de mayor interacción entre las congregaciones. También pudimos escuchar experiencias de hermanas comprometidas en la educación en Sudáfrica, Australia y España, quienes compartieron diferentes caminos de asociación que asumieron para visibilizar y potenciar nuestra propuesta educativa como dominicas.
Contamos con el aporte de la Hna. María Teresa Maya (de la Congregación de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado) quien utilizando la imagen del armado de la tradicional colcha americana nos introdujo de una manera preciosa en la densidad del símbolo elegido para esta asamblea. También la Hna. dominica Helen Alford nos habló sobre el necesario reequipamiento desde la tradición dominicana para un compromiso auténtico en la misión.
Hermanas de EEUU y África nos invitaron a participar en un curso virtual sobre carisma dominicano que lanzarán en la web en 2020 y Fr. Gianni Festa nos animó a iniciar procesos de beatificación de nuestras hermanas para mostrar al mundo ejemplos de santidad en la vida dominicana. Por su parte integrantes del staff del Angelicum nos presentaron las diferentes propuestas de estudio de grado y posgrado que se pueden realizar en la Universidad Dominicana de Roma y del convenio existente entre el Angelicum y DOMUNI (la universidad virtual dominicana).
Nos visitó también el Maestro de la Orden, Fray Bruno Cadoré alentándonos a fortalecer la comunión en la familia dominicana y un representante del Movimiento Juvenil Dominicano que nos alentó a invitar a nuestros jóvenes al próximo encuentro internacional que se llevará a cabo en Nairobi en 2020.
No faltó una tarde de descanso recorriendo el precioso pueblo y castillo medieval que se encuentran en al lado del lago Bracciano, cercano a Roma. Este paseo junto a los almuerzos, cenas y momentos de café, potenciaron nuestros encuentros informales y fortalecieron nuestra experiencia de comunión.
Infinitas gracias a las hermanas que con tanta dedicación prepararon esta Asamblea y a mi congregación que desde los inicios de la DSIC nos impulsó a participar en estos espacios que tanta vida nos regalan.»
