Comentario bíblico
DOMINGO XXXIII:Todos los años la liturgia nos regala un tiempo de discernimiento al final del año. Aprovechemos este tiempo especial de mirarnos por dentro, confiados de que el Señor pondrá palabras de sabiduría en nuestro corazón para que podamos ser fieles, es decir, ser testimonio de su proyecto en medio de lo que nos toca vivir.
